¿Quisieras comprar una casa en Mérida? Probablemente te han hablado ya del
calor de la ciudad. Te decimos cómo es realmente el clima en Mérida.
Al pensar en el clima de Mérida, tal vez lo primero que se te venga a la mente sea
la palabra calor. Y hay algo de cierto en eso. Mérida, ubicada al norte de la Península de Yucatán, es una ciudad tropical en la que predominan las temperaturas cálidas y un clima húmedo. Su vegetación es exuberante, característica de la selva baja y producto de los altos niveles de humedad. Por esta razón, se ha extendido la idea de que en la ciudad prevalece el calor extremo durante todo el año. Sin embargo, no es así. En Mérida, la temperatura media fluctúa entre los 18 y los 36 grados centígrados. Entonces, ¿cómo son realmente las estaciones en Mérida?
Los meses en los que las temperaturas alcanzan el máximo nivel son mayo, junio y julio. Durante esta época, que abraza una parte de la primavera y otra del verano, las temperaturas pueden superar la media y llegar hasta los 40 grados.
Sin embargo, son temperaturas excepcionales; incluso, de acuerdo con el Sistema Meteorológico Nacional, la media máxima durante esta época ronda los 35 grados centígrados. Los residentes sacan el máximo provecho a estos días, sea visitando los cenotes ⎯cuyas aguas en otras épocas resultan muy frías para algunos⎯ o mudándose durante el periodo vacacional a una de las numerosas playas cercanas como Progreso o Chicxulub.
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La primavera ⎯además de temperaturas cálidas⎯ trae consigo una explosión de color. En esta época, concretamente durante los meses de abril y mayo, florecen el framboyán y la copa de oro; verás las calles y avenidas de la ciudad encendidas de rojo y amarillo.
El verano, por su parte, se acompaña de lluvias abundantes. Durante julio, agosto y parte de septiembre, es esperado que llueva casi todos los días. No se trata de lluvia constante, sino de aguaceros torrenciales que refrescan los días y alimentan la exuberante vegetación de la zona. Es esta la época de los huracanes.
Aunque sus efectos alcanzan a la ciudad, Mérida no es una ciudad costera y por tanto no es un punto de riesgo. Si bien es cierto que, en alguna ocasión, huracanes con gran potencia, como Isidoro, han impactado la ciudad, se trata de casos aislados. No obstante, el periodo de lluvias puede extenderse hasta noviembre, aunque no alcanzan la misma intensidad que en el verano.
Por otro lado, el otoño es una época de temperaturas bastante amables. Durante septiembre, octubre y parte de noviembre, el termómetro marca una media entre los 22 y los 27 grados centígrados. La característica de este periodo es los inigualables atardeceres, que pintan el cielo de tonos naranjas, rosas y violáceos. Son días perfectos para tomar largos paseos, visitar las numerosas ruinas arqueológicas cercanas o recorrer a pie el Paseo de Montejo y las calles del centro de Mérida, el segundo más grande del país.
Por último, el invierno ⎯que va de diciembre a febrero⎯ tiene temperaturas medias de los 18 a los 20 grados centígrados, por lo que suelen ser muy agradables. Enero es el mes que registra temperaturas más bajas. Excepcionalmente, el termómetro puede bajar hasta los 12 o 13 grados, incluso un poco menos. Sin embargo, no es lo común. Los inviernos en Mérida siguen siendo propicios para hacer todo tipo de actividades. Aunque las aguas de las playas cercanas también bajan su temperatura, para muchos continúan siendo una opción.
En resumen, las temperaturas de Mérida, aunque cálidas, no son siempre altas. Una ventaja es que, a diferencia de otras ciudades, en Mérida el clima no es extremo. Es decir, las temperaturas se mantienen en un rango bastante estable; sólo de forma excepcional los residentes han experimentado inviernos más fríos de lo normal, huracanes o temperaturas que sobrepasan los rangos usuales. Si una de tus dudas al pensar en comprar una casa en la ciudad era el clima, no tienes más de que preocuparte: Mérida, los cenotes, playas y rías de Yucatán te están esperando.